Pecano Fact: Guías Electrónicas y la Facturación Electrónica en Perú
La transformación digital ha llegado a varios sectores clave de la economía peruana, y uno de los más importantes es el sector tributario y de facturación. En este contexto, las guías electrónicas y la facturación electrónica son elementos clave que no solo han modernizado el sistema de emisión de comprobantes fiscales, sino que también han sido una parte esencial de la formalización de negocios y la lucha contra la evasión fiscal. En Perú, la implementación de estas herramientas se ha vuelto obligatoria para la mayoría de las empresas, generando un impacto positivo en la eficiencia del sistema tributario y en la transparencia de las transacciones comerciales.

¿Qué son las Guías Electrónicas?
Las guías electrónicas son documentos digitales utilizados en el transporte de mercancías, y se emiten cuando se realiza el traslado de bienes de una empresa a otra o dentro de una misma empresa. Estas guías contienen información clave como el origen y destino de los productos, el tipo de mercancía, los datos del transportista, entre otros detalles esenciales. Son una herramienta crucial para garantizar el control y trazabilidad de las mercancías, evitando el contrabando y el incumplimiento de las normativas fiscales.
En el contexto peruano, las guías electrónicas permiten que las empresas registren y transmitan esta información al sistema de la Superintendencia Nacional de Aduanas y de Administración Tributaria (SUNAT), la entidad encargada de supervisar la correcta recaudación de impuestos en el país.
Facturación Electrónica en Perú
La facturación electrónica es el proceso mediante el cual las empresas emiten y envían sus comprobantes de pago de forma digital, a través de un sistema informático autorizado por la SUNAT. Este proceso reemplaza los comprobantes físicos (como las facturas de papel) y facilita tanto la emisión como la recepción de documentos fiscales de manera eficiente, rápida y segura.
En Perú, la facturación electrónica ha sido obligatoria para todas las empresas desde 2018, según el cronograma establecido por la SUNAT. El objetivo de esta medida es mejorar la formalización de los negocios, optimizar la recaudación de impuestos, reducir el uso de papel y minimizar el riesgo de errores en la emisión de comprobantes. La facturación electrónica también permite un mayor control por parte de la SUNAT sobre las transacciones comerciales, lo que ayuda a combatir la evasión fiscal.
Uso Obligatorio de las Guías Electrónicas
y Facturación Electrónica en Perú
En el contexto de la legislación peruana, tanto las guías electrónicas como la facturación electrónica son obligatorias para un amplio número de contribuyentes. El uso de guías electrónicas está destinado principalmente a los transportistas y a las empresas que realizan transferencias de mercancías dentro del país. La SUNAT exige que estas guías sean generadas y enviadas de manera electrónica, de acuerdo con las normativas establecidas, para garantizar el cumplimiento de las leyes fiscales y aduaneras.
Por otro lado, la facturación electrónica también ha sido impuesta para los contribuyentes que superan ciertos umbrales de ingresos o que operan en sectores específicos. A través de la facturación electrónica, la SUNAT recibe de manera inmediata los datos de las transacciones comerciales, lo que permite un seguimiento en tiempo real de las ventas y compras realizadas por las empresas.
Beneficios de la Facturación Electrónica
y las Guías Electrónicas
- Mayor transparencia: La facturación electrónica y las guías electrónicas permiten un control más riguroso por parte de la SUNAT, lo que facilita la detección de posibles prácticas fraudulentas, como la evasión de impuestos.
- Reducción de costos operativos: Al eliminar la necesidad de emitir y archivar documentos en papel, las empresas pueden reducir significativamente los costos asociados con la impresión, almacenamiento y manejo de comprobantes fiscales.
- Mejora de la eficiencia administrativa: Los procesos de facturación y traslado de mercancías se vuelven más ágiles, lo que optimiza el tiempo dedicado a la gestión de documentos y reduce el riesgo de errores en la información.
- Accesibilidad y seguridad: Al ser documentos digitales, tanto las facturas como las guías electrónicas están disponibles en tiempo real para los interesados (empresas, clientes, autoridades fiscales), lo que facilita su consulta y verificación. Además, el uso de plataformas seguras para su emisión y almacenamiento garantiza la integridad y autenticidad de los documentos.
- Fomento de la formalización: Las empresas que adoptan la facturación electrónica y las guías electrónicas se alinean con las normativas fiscales, lo que las convierte en actores más transparentes y confiables en el mercado, a la vez que se benefician de una mayor inclusión en el sistema tributario formal.